Joseph
Hubertus Pilates nació en un pueblecito cercano a Dusseldorf
(Alemania) en 1880. Era un niño de complexión delgada y solía
enfermarse frecuentemente, sufrió entre otras de asma, raquitismo y
artritis reumatoide. Esto le llevó a interesarse por el el cuerpo
humano y el desarrollo físico de este. Estudió disciplinas
occidentales (boxeo, gimnasia, danza, natación,...) y orientales
(yoga, chi-kung, tai chi,....) a partir de las cuales empieza a
elaborar un método de “control corporal” para tener más
vitalidad y fortalecer su sistema inmunológico.
En
1912 viaja a Inglaterra para mejorar su técnica de boxeo y encuentra
trabajo como acróbata en un circo. Al estallar la Primera Guerra
Mundial fue hecho prisionero en Lancashire por ser de nacionalidad
alemana. Durante su reclusión elabora ejercicios para él y sus
compañeros. Para que los heridos y enfermos postrados en camas
también pudiesen hacerlos adosa a los cabeceros una serie de
elásticos y muelles. Gracias a esos ejercicios y aparatos Pilates es
nombrado para el servicio sanitario inglés. Se dice que durante la
epidemia de gripe de 1918 que azotó su campamento, ninguno de sus
"pacientes” enfermó.
Cuando
volvió a alemania, Adolf Hitler le ordenó entrenar a la policía
secreta alemana. Pilates , contrario al régimen político, rechazó
la propuesta y fue obligado a emigrar a EEUU (Nueva York) donde
empezó a enseñar su método a atletas, actores y bailarines hasta
su muerte en 1967.
El
deseo de Joseph Pilates siempre fue que esta disciplina estuviera
enfocada para el ciudadano “de la calle” y buscaba que el método
Pilates fuera asequible para todo el mundo. Afirmaba que los
principios de este método debían incorporarse a toda nuestra
actividad diaria hasta que acabaran convirtiéndose en algo natural e
inconsciente.
Joseph Pilates a los 57 años (dcha) y a los 82 años (izda) |
“En
10 sesiones te sentirás diferente
En
20 sesiones parecerás diferente
Y
en 30 sesiones tendrás un nuevo cuerpo”
-
Joseph H. Pilates -