El
fundador del reiki fue Mikao Usui (1865-1926). Nacido en Japón y
estudioso de las técnicas de sanación, en uno de sus retiros
descubrió la forma de canalizar la energía Reiki basándose en
técnicas milenarias tibetanas y desarrollando la técnica actual.
La
palabra Reiki significa "Energía universal", el terapeuta
mediante la imposición de manos hace pasar energía a través del
paciente con el objetivo de equilibrar su organismo. Durante la
sesión de Reiki, el receptor, no siente ningún tipo de dolor y no
se manipula su cuerpo. Reiki proviene de los principios de la
medicina oriental, que está basada en los chakras y en los
desequilibrios energéticos que se producen en estos. Según estas
teorías el organismo dispone de una serie de puntos energéticos
cuya tarea es la recepción, acumulación, transformación y
distribución de la energía por el organismo. Cuando uno de estos
puntos energéticos se bloquea por algún motivo físico o emocional
el cuerpo puede llegar a enfermar. Con Reiki se equilibran estos
puntos para que la energía fluya correctamente.
Esta
terapia es un buen complemento a cualquier terapia médica o
psicológica. De hecho actualmente esta técnica ya está presente en
muchos hospitales con excelentes resultados.
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